Cuidado y Mantenimiento del Jardín Eterno

Introducción al Ecosistema Cerrado

 

Un jardín eterno es un ecosistema autosuficiente,  que recrea las condiciones de un ambiente tropical, caracterizado por altos niveles de humedad y temperatura. Dentro de su contenedor de cristal, elementos vegetales, minerales y microorganismos interactúan en un ciclo natural que se autoabastece, minimizando la necesidad de intervención externa.

El mantenimiento de su Jardín Eterno es notablemente sencillo: requiere luz indirecta, un riego mínimo (generalmente una o dos veces al año) y una observación periódica. Si surge cualquier duda o consulta, estaremos encantado de responderle en el menor tiempo posible.

 

Requerimientos de Luz

 

Las plantas en el Jardín Eterno necesitan luz natural para realizar la fotosíntesis.

• Ubicación ideal: Coloque el terrario cerca de una fuente de luz natural brillante, pero evite la exposición directa a los rayos del sol.
• Precaución con el sol directo: El cristal puede generar un efecto lupa, aumentando drásticamente la temperatura interna y quemando las plantas de forma irreversible. El musgo, que prefiere la sombra y la humedad, amarilleará rápidamente si se expone a luz solar directa, y la única solución será su reemplazo completo.
• Rotación: Para asegurar un crecimiento uniforme, se recomienda girar ocasionalmente el recipiente para que toda la composición reciba una iluminación equitativa.

 

 

Gestión del Riego y Condensación

 

El ciclo de condensación es una parte vital y normal del ecosistema cerrado (evaporación, condensación y retorno del agua a la tierra).

• Condensación normal/alta: Si observa una condensación significativa en el cristal, indica un entorno saludable. Sin embargo, si la condensación es excesiva y dificulta la visibilidad de las plantas, sugiere un exceso de calor o humedad. En este caso, abra la tapa durante 24 horas para permitir la aireación.
• Señales de falta de agua: El riego es necesario solo si la condensación es muy baja, la tierra se siente seca al tacto, o el musgo carece de su humedad característica.

Procedimiento de Riego (normalmente 1-2 veces al año):

 

 

Riegue únicamente si se presenta alguno de los siguientes escenarios:

1. Disminución notable de la condensación habitual en el cristal.
2. El musgo se siente seco al tacto.
3. La tierra alrededor de la planta principal está seca. (Para verificar esto, levante suavemente el musgo circundante con la mano o unas pinzas y palpe la tierra).

Aplicación: Utilice un pulverizador para regar con moderación, humedeciendo las piedras de la base sin permitir que el agua se acumule en el fondo del recipiente.

 

Control de Temperatura

 

El Jardín Eterno prospera en un rango de temperatura óptimo de entre 12°C y 25°C.

Dado que las especies internas son de tipo tropical y están adaptadas a la humedad, si la temperatura ambiente supera este rango, se aconseja destapar el terrario hasta que las condiciones se normalicen. Tras unos días de aireación, verifique si el ecosistema requiere un ligero riego.

 

Poda

 

Se recomienda la poda cuando las hojas comienzan a rozar o tocar las paredes de cristal.

• Técnica: Corte la rama por debajo de las hojas deseadas.
• Post-poda: Deje el recipiente destapado durante 24 horas en un lugar con baja humedad para permitir que los cortes de las plantas cicatricen adecuadamente. Pasado este tiempo, compruebe si el jardín necesita riego.